No amo mi patria
Su fulgor
abstracto
es inasible.
Pero (aunque
suene mal)
daría la vida
por diez lugares
suyos,
cierta gente,
puertos, bosques
de pinos,
fortalezas,
una ciudad
deshecha,
gris, monstruosa,
varias figuras de
su historia,
montañas
-y tres o cuatro
ríos.
Pues yo no daría
la vida, pero si me encantan muchos de sus lugares y personas: Mi habitación,
mi librero, El Grupo, La Hacienda, los "hijos del caos", el Jans, el
Tadmunjin Kan, La Norita tan grandota, mis cuatro perritas, el patio de mi casa
con su rosalote, el camino a Plateros, las carnitas de Calera, y claro...mi
wera.
Aunque siento un
vacío extraño cuando pienso en aquellos que están allende el Bravo pero
que son de acá y han tenido que irse por el desmadre que estamos viviendo de
este lado - y por muchas otras razones - Por cierto, ya va a empezar aquí en el
Edomex el cotorreo de las elecciones.
Saludos a todos
ellos: familiares y compañeros….
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