El programa de A.A. es todo un proceso que muy pocos recién llegados empiezan a caminar como se debe, desde el principio.
Creo yo y es mi experiencia, que los primeros tiempos (días, semanas, meses y quizá años) solo son ocupados para dejar de beber, y en muchos otros casos ni eso que ya hay muchas personas que entran y salen de AA y sus derivados.
Hasta que algo sucede – se toca fondo dentro de AA - y entonces sí, ya dulcemente razonables, se inicia verdaderamente el camino de la Recuperación. Tal como lo marca el V Capítulo cuando dice “te suplicamos que seas valiente y concienzudo desde el mismísimo comienzo”. Para mí éste es el mismísimo comienzo, sin importar el tiempo que antes haya pasado; el “mismísimo comienzo” es el preciso momento en que, movido por el sufrimiento, acepto alma y corazón adentro la completa derrota, y no solo ante el alcohol, que para esos momentos es el problema menos grave – aunque es cuando hay más riesgo de recaer - sino ante la vida misma, la impotencia de no saber vivir.
Desde aquí, creo yo, es cuando ya aprendimos - en cabeza propia - lo que no hay que hacer y comenzamos a experimentar “de todo corazón” los Pasos de Recuperación de AA, cuando ya el primero de ha dado “a la perfección”.
Así, derrotados por la vida, aún con Grupo, hemos tenido que aceptar que nunca es tarde para comenzar y ya con la experiencia de lo que no se debe hacer, empezar a caminar, paso a paso, por el sendero correcto. En muchos casos la situación está ahora mucho más difícil de lo que estaba cuando llegamos por primera vez y se deberá redoblar el esfuerzo, doblegar el orgullo y actuar con la honradez que antes no se tuvo.
He visto a muchos compañeros – y mi también me tocó - desfilar por los Grupos, con años en A.A. llenos de rencor, de desesperanza, sin ambición, sin saber que hacer: criticando todo y a todos, dando sugerencias donde no se los piden, diciendo como debe hacerse, y siendo, realmente, un lastre para los demás.
Aquí es donde yo digo, ¿dónde está tu recuperación veterano?, ¿no la hay?, ¿Qué esperas? ¿No sabes que hacer o como recomenzar?
Si quieres, puedes reiniciar el camino leyendo el capítulo número 5 del Libro Azul y comienza de nuevo. Estoy contigo.
Digo yo
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